Si Ricardo López Aranda era autor de teatro, también era poeta, pero guardó secretos sus poemas y nunca intentó publicarlos, por pudor, ya que la poesía es el más fiel reflejo del alma... de su mar...
« ...sospecho que el motor secreto de toda mi creación literaria está en estos versos. Que en ellos está la clave de todo. Quizá sea ésta una de las razones -hay otras- por las que no los enseño a nadie... »
Poeta era Ricardo, en sus obras, en su vida...
« ...Cuando rebusco en las viejas carpetas y ordeno los viejos poemas, y como me sorprenden los más viejos poemas -los más lejanos-, los que escribí a los dieciséis años, como ése que dice: "Me has puesto, Dios, colgaduras, de terciopelo negro, en las ojivas de mi catedral de carne", que me ha servido para trazar un arco y dentro de él encerrar toda mi vida y ofrecértela así hecha humo y piedra.
Al releerlos todos —Dios mío, casi dos mil poemas— me ha dejado perplejo observar la insólita unidad de todo —en el fondo somos desde la pubertad los mismos— [ ... ] el hombre maduro -los cuarenta- que hoy relee y el que a los dieciséis trazó los planos -sin saberlo- de estas diez catedrales de mi vida... »
Empieza a escribir sus primeros poemas en 1951, con dieciséis años. Y durante toda su carrera como escritor seguirá escribiendo poemas a la sombra de sus obras de teatro. A lo largo de su vida escribirá 40 libros de poesía que mantendrá ocultos. Cada libro ilustra una época de su vida, y en ellos el autor muestra su intimidad y expresa sus ilusiones y sus desesperanzas.
Las dos únicas veces que enseñó sus poemas fue al principio, en 1956, cuando presentó su libro de poemas Angeles de Barro al premio Garcilaso de la Vega, con el cual quedó finalista; tenía 21 años... y al final de su vida, en 1995, con el libro El Crisantemo y la cometa; tenía 60 años... 40 años de silencio absoluto...
« ...el no tener ni pretensión de ser, ni necesidad de ser declarado -admitido- como poeta, por tener ya mi nombre hecho y prestigiado en otro campo literario, me permite una sinceridad que por ejemplo en teatro sería difícil arrancarme. [ ... ] Quizá explique todo esto el hecho de que nunca escribí versos para verlos publicados... »
Las únicas publicaciones que se conocen de su poesía son El Crisantemo y la cometa, editado ya cuando estaba enfermo, en 1995, un año antes de su muerte y Biografía secreta que conoció una publicación póstuma en 2003.
Los poemas editados en el libro El crisantemo y la cometa fueron escritos en los meses que siguieron a la muerte del tercer hijo de Ricardo López Aranda, en la primavera de 1971.
Editorial La Sirena del Pisueña, 1995 |
La publicación de Biografía Secreta contiene cuarenta y cinco poemas seleccionados en 18 libros escritos por el autor a lo largo de su vida. Estudio preliminar sobre la poesía de Ricardo López Aranda, realizado por Arturo del Villar Santamaría. Ed. Universidad de Cantabria, 2003 |
Títulos de los libros de poemas de Ricardo López Aranda
Angeles de Barro
Mi féretro es un árbol vivo
Angelus para una misa negra
Los silencios cautivos
Las lunas ahorcadas bajo el mar
Danzas de mi muerte
El Laberinto
El mar es un laberinto
de espejos de agua
quien entra en él
no regresa jamás.
Pájaros de agua
Deshabitada casa del recuerdo
Catedrales de aliento
Extraño Paraíso
El crisantemo y la cometa (la cometa y el niño)
Diario intimo de un ángel
Cuando nace el primer hijo
El arpa del tiempo
Cuando agoniza un niño
Primer amor, ultimo amor
Petrificación de lo fugaz
Inocencia imposible
Los cementerios de estrellas
Las ánforas del tiempo
Elegías por mis padres muertos
Acorazado corazón
Laberinto de espejos
Antifonario blasfemo
Se me va la vida como un río
Pasión y muerte del toro de los ojos verdes
Tallado en vacío
Los flagelantes
Las águilas incendiadas
Aquarium para peces disecados
Treinta lecciones de amor
Soledades
Alba de ejecuciones
Horóscopo para un ángel de piedra
Oficio de verdugo
Volver al manantial
A la deriva
Catedral primera
Catedral segunda
Catedral tercera
Biografía secreta